31/05/2009

Atrapado

Estoy atrapado. Quiero salir corriendo y gritarle al viento que me lleve lejos, que no me deje volver, pero no puedo. O mejor dicho, no debo.

Prostituyo mi alma en contra de mi mente y lo que obtengo a cambio no lo compensa.

Seguir es reunir la fuerza y el valor necesarios, es madurar y mirar lo que más conviene, dejando a un lado lo que más apetece. Es aprender a controlar los impulsos y convertir un sí en un no, cuando sabes de antemano que las consecuencias serán negativas. Seguir es acumular rabia, ganas de hacer la maleta y de comprar un billete de ida.

Y sé que ese momento llegará pronto. El momento de no sentirme atrapado nunca más y poder respirar libertad...

30/05/2009

Sobrevivir

No es que no sienta nada, igual es que no puedo sentir nada. Puede ser que me haya dormido por dentro, o peor… que me haya muerto y que, por más que desee sentirte, tenerte, adorarte, amarte, no pueda. Es posible que haya querido sentir tanto, que me haya dejado llevar por mi imaginación tantas veces y que haya vivido historias que en mi mente han sido de película cuando en realidad carecían de sentido alguno, que me haya vuelto inmune a ese sentimiento que ya no reconozco, que ya no recuerdo, a eso que busco dentro de mí y veo que ya no tengo.
Existen tantos tipos de personas que, al final, somos todos tan iguales como diferentes y puede que en mi diferencia, que en mi independencia, me toque seguir así, desmentirme, aceptarme, dejar de imaginar algo que ni siquiera sé si existe, sobrevivir.

28/05/2009

Sin tí

La luna está cediendo paso al sol
y Venus se despide hasta mañana.
El mar sigue rompiendo junto a la playa
y ha vuelto a pasar otro día sin tí.
¿Qué ciudad se te quedó en el corazón?
¿Qué canción estás apunto de tararear?
¿Qué verdad te ha quedado por buscar?
¿Qué sientes tu tan cerca del final?
Seguirá pasando la luna por tu ventana,
seguiran pasando las cosas sin tí.
Ya no pasaran las que hacen tanto daño
y verás desde tu escaparate lo que fue de mí...

27/05/2009

"Los homófobos son unos reprimidos"

Aquí les dejo una entrevista realizada por EL PAÍS a la grandísima Mónica Naranjo, para mi: un referente, un ídolo, una gran mujer, una gran cantante y, sobre todo, una gran persona...
...Y tan grande es, que miren como responde:

Pregunta. ¿Dosifica sus apariciones porque acabó agotada?

Respuesta. Hablo poco porque soy malísima vendiéndome y no necesito estar expuesta. La música es una sensación; si la mía te produce buen rollo, ganas de llorar o de conducir, ¿qué más quieres?

P. ¿Es agotador lo de ser diva?

R. La diva es ese personaje que sube a escena: una mujer camaleónica, dramática, distante, altiva y sufridora, casi inaccesible. Si yo fuera así, estaría para el arrastre. Esa Mónica y yo no nos parecemos en nada.

P. Entonces, ¿la Mónica Naranjo real es una señora de andar por casa?

R. ¡Y una madre cojonuda! Tengo un hijo de 17 años que me cuenta sus intimidades y le recomiendo que ame hasta las últimas consecuencias, a mujeres o a hombres, eso da lo mismo.

P. Desde que grabó Tarántula, ¿ha encontrado muchas cosas que merezcan un aguijonazo?

R. Nos lo merecemos todos, en el culo, por habernos dejado embaucar por el consumismo. Sólo merece la pena gastar dinero en comer. El euro ha sido el engaño más grande, me parece un escándalo que nuestros hijos no puedan comprarse ni unas casas tan mal hechas que se oyen los pedos del vecino. Igual ha llegado el momento de dejar de ser unos pringados.

P. Pero no hará usted playback, como otras...

R. Una o dos canciones sí, y es mano de santo. Lo hacen Britney o Madonna, cantar y bailar dos horas es imposible.

P. ¿Es legítimo eso?

R. Quien diga que es poco moral, miente. Prefiero ser sincera que hipócrita.

P. ¿Y ahora una orquesta?

R. Para mí la música clásica simboliza la atemporalidad, aunque mi clasicismo sea un poco popular: me gusta recordar que Vivaldi era panadero.

P. ¿Alguna recomendación para el Orgullo?

R. Conviene seguir participando para consolidar unos derechos básicos. Los homófobos son unos reprimidos. Me asombra que, con miles de niños en orfanatos, haya quien cuestione el derecho de adopción.

P. ¿Y si alguna vez le diera por cambiar de aires?...

R. No sé si cambiaría de opción sexual, pero me encantaría ser una campesina con trenzas y escote, tipo holandés, de las que se tiran a los tíos en el pajar.
Mo... ¡eres una crack!, ¡te amo!

26/05/2009

Muy pronto...

Valencia


Dublin (Ireland)

...

20/05/2009

Recordando el futuro

Ya esta a la venta en iTunes "Recordando el futuro", el último disco de Andermay, el que de alguna manera es su despedida.

Yo, por supuesto, ya me lo he comprado y estoy disfrutando de los geniales temas inéditos que incluye. Fue tan grato descubrirlos en 2003 como es hoy de triste el saber que no vamos a volver a tener en nuestras manos algo nuevo de ellos, ni volver a escucharlos cantar sus canciones. Pero todo lo que empieza termina, las etapas se acaban y dejan paso a otras que siempre esperamos sean mejores. Sólo me queda darles las gracias por habernos regalado tanta música y tantos momentos que junto a ella vivimos todos los que los conocimos. Y, al fin y al cabo, siempre nos quedará recordar el futuro.





¡Gracias Jesus!, ¡gracias Amaya!, ¡gracias amigos!...



http://itunes.apple.com/WebObjects/MZStore.woa/wa/viewAlbum?id=311820378&s=143454

19/05/2009

Repetición de la fórmula

Cuando algo funciona, ¿por qué cambiar de método?
Si ya funcionó la fórmula en su momento, ahora que vuelvo a necesitar de ella, espero que vuelva a hacerlo... ¡Seguro que sí!

Ich werde die Prüfung bestehen
Ich werde die Prüfung bestehen
Ich werde die Prüfung bestehen
Ich werde die Prüfung bestehen
Ich werde die Prüfung bestehen
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14/05/2009

Recuerdos

Nos encanta recordar, asociamos lugares, objetos y palabras con personas, vivencias y pasado, guardándolos en nuestra mente hasta que un día un golpe de luz en tu mente te trae de nuevo imágenes, situaciones, recuerdos… recuerdos que no sabes si son tal y como los recuerdas, recuerdos que jamás sabrás si son de verdad.


Hoy ha sido un día de recuerdos y no precisamente de los buenos. He visitado un lugar que frecuenté durante mi infancia, un lugar que a día de hoy y después de 19 años me sigue poniendo nervioso. Cuando me pasaron a la sala y me senté en aquel sillón frío, gris y rígido miré a mi alrededor y me di cuenta de que mi mente me había jugado una mala pasada, nada era como lo recordaba, todo era mucho más pequeño que las imágenes que mi recuerdo me estaba enviando de vuelta y ahora, todo era menos frío que entonces, ya me era familiar.

Recuerdo haberme sentido pequeño en aquellas cuatro paredes, haber sentido el frío del sillón en mi piel y la tristeza de unas paredes que nunca escuchaban nada positivo mientras yo permanecía entre ellas. En realidad todo siempre fue del mismo tamaño y fui yo el que crecí, pero no puedo cambiar mis recuerdos.

Y la historia se repite. Aquel olor a limpio, la poca luz que entraba por la persiana, el ligero murmullo de la gente que habla en las habitaciones contiguas y aquellas paredes blancas. Aquellas paredes, hoy, volvieron a escuchar malas noticias, nada positivo, ni un ápice de optimismo. Y mientras las palabras se me clavaban como cuchillos una y otra vez al recordarlas y mi estomago se encogía hasta hacerme casi llorar, salí de allí con la cabeza gacha, la sonrisa desdibujada, las pupilas dilatadas y repitiendo una y otra vez lo mismo: ¿por qué?

Dos minutos más tarde se me borraron aquellas palabras de mi mente, se me volvió a dibujar la sonrisa y volví a levantar la cabeza, llenando todo mi cuerpo del optimismo que en aquella habitación brillaba por su ausencia. Da igual lo que haya pasado, da igual que no hayan sido buenas noticias, da igual que todo tenga que ser como hasta ahora y no pueda deshacerme de esto que tanto me molesta, ¿qué más da?, no importa y ¿sabes por qué? Porque lamentarse por las pequeñas cosas, venirse abajo porque nada salga como esperas y querer que todo sea ideal es una postura egoísta. Los hospitales están llenos de gente que tiene la vida colgando de un hilo, niños, adolescentes, adultos y mayores que cada día luchan por seguir adelante, sin quejarse, sin lamentarse, con la más fuerte de las ganas y la más grande de las fuerzas.

Después de que mi mente me haya traído al presente algún recuerdo de esos que no sé si son mentira o verdad, pensé que no tengo derecho a estar mal y que mi vida, mi fuerza, mi felicidad, mi optimismo y mis ganas de hacer todo lo que me apetezca, donde primero empiezan es… en mí mismo.